¿Pero el agua no es suficiente?
Mito:
Lavar la zonas íntima no es bueno.
Verdad:
Al igual que hacemos con cualquier otra parte de tu cuerpo, cuando elegimos un producto específico para el cabello o el rostro, es importante que también cuidemos de la zona íntima con un producto específico.
Empecemos por el principio: vulva y vagina no son lo mismo.
La vagina es el canal genital interno que une el útero con la vulva, es ese órgano extraordinario que puede albergar una relación sexual con penetración, acoger un embarazo o hacer fluir la sangre menstrual, y es capaz de limpiarse por sí mismo.
La vulva es la zona genital externa que se extiende desde el pubis hasta el ano, en ella se encuentran los labios pequeños y grandes, y el clítoris. Cada vulva es diferente y cambia con el tiempo, pero hay algo que las une a todas: la delicadeza de su piel.
Es una zona que necesita una atención especial y que debe limpiarse a diario con un gel íntimo específico y agua tibia.
El agua por sí misma no es suficiente para eliminar la suciedad o los pequeños residuos que contribuyen a la formación de molestias como sequedad, picor, ardor e irritación.